Título original: Everything You Always Wanted to Know About Sex * But Were Afraid to Ask
Director: Woody Allen
EE.UU., 1972, 88 minutos
Todo lo que usted siempre quiso saber... (1973) |
Everything You Always Wanted to Know About Sex * But Were Afraid to Ask (1972) responde a la irreverencia de un Woody Allen iconoclasta dispuesto a no dejar títere con cabeza. Y qué mejor temática que la sexualidad y sus desviaciones para articular un filme de episodios tan divertido como delirante. Siete historias en clave surrealista, como la del hombre (Gene Wilder) que se enamora de una oveja armenia, o abiertamente blasfemas como la del rabino que acude a un concurso televisivo con la finalidad de confesar sus perversiones mientras la esposa se sienta a sus pies para devorar unas chuletas de cerdo.
Queda claro, pues, el carácter transgresor de un cineasta que lo mismo ridiculiza a la realeza del medievo en "¿Funcionan los afrodisíacos?" que la doble moral burguesa en "¿Son homosexuales los travestis?" Preguntas retóricas que, en el caso de "¿Por qué algunas mujeres tienen dificultades para llegar al orgasmo?", adquiere la forma de homenaje explícito al cine italiano, hasta el extremo de que la pareja protagonista (el propio Woody y la que fuera su esposa, Louise Lasser), así como el resto de personajes de dicho fragmento, se expresan enteramente en la lengua de Fellini y Antonioni.
Aparte de recurrir por primera vez al tipo de letra Windsor Light Condensed para los títulos de crédito, que Allen utilizaría en lo sucesivo en todas sus películas, la cinta que nos ocupa pasa también por ser la única adaptación, en toda su filmografía, de un libro ajeno. Aunque, en honor a la verdad, lo único que el cómico aprovechó de la obra homónima del doctor David Reuben fueron algunos epígrafes de los distintos episodios que integran el filme.
Y así, al abordar de manera abierta y cómica cuestiones sexuales que en su época eran consideradas tabú, Allen parodia los libros de autoayuda sobre dicha temática, desenmascarando mitos y prejuicios. Un ejercicio humorístico, a menudo sarcástico y provocador (como los espermatozoides en "¿Qué sucede durante la eyaculación?" o la teta gigante y asesina de otro de los sketches), no exento de controversia, toda vez que la película fue objeto de censura en no pocos países, siendo el caso de Irlanda, donde el metraje original sufrió varias mutilaciones, uno de los más célebres.
Una de las películas más divertidas de Allen. Si en "Toma el dinero y corre" parodiaba el género documental, aquí aprovecha cada episodio para un género distinto: las películas sobre la Edad Media, el drama romántico (la historia del médico y la oveja), el slapstick (el travesti), la televisión (el concurso sobre perversiones), el cine italiano como bien señalas, el cine de terror o, finalmente, el de ciencia-ficción en el episodio absolutamente genial de la relación sexual vista desde el interior del cuerpo del hombre.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy cierto: digamos que sabe ver el lado caricaturesco de cada estilo, lo cual habla bastante a favor de alguien que por aquel entonces aspiraba a postularse como cineasta más que como humorista.
EliminarUn abrazo.
No creo que Allen vaya a pasar a la posteridad por este film precisamente, pero sí hay que reconocerle que no se conformó con lo que se llevaba y prefirió hacer experimentos.
ResponderEliminarExperimentos que demuestran una inmensa habilidad para la sátira, sin duda el punto fuerte en sus inicios.
EliminarLa recuerdo graciosa, pero tambiém muy crítica como bien dices.
ResponderEliminar¡¿También sabes sobre tipografía?! ¡qué crack!
Abrazos, Juan ídolo
Bueno, no exageres: son sólo cosas que leí por ahí para documentarme.
EliminarTú sí que eres mi ídolo, Frodito.