Dame un respiro, Araña (1970)

Título original: Sem Essa, Aranha

Director: Rogério Sganzerla

Brasil, 1970, 102 minutos

Dame un respiro, Araña (1970)

Rodada el mismo año que Copacabana Mon Amour, Dame un respiro, Araña posee no pocas similitudes con ella: mismo director (Rogério Sganzerla), misma actriz protagonista (su esposa, Helena Ignez) y, por encima de todo, la misma actitud de denuncia. Son continuas las proclamas contra el imperialismo y el subdesarrollo, así como las preguntas retóricas sobre el destino incierto que aguarda a los brasileños. Y los gritos: porque en ambas películas se grita continuamente y sin motivo aparente, quizá como válvula de escape ante una realidad sumamente decepcionante.

Los dos filmes fueron rodados en color, en barrios marginales, y en ambos se hace alusión a menudo a los orishas de la religión yoruba (Yemayá, Changó...). También comparten comicidad: en el caso de Dame un respiro, Araña, el actor Jorge Loredo (fallecido, por cierto, el pasado mes de marzo) parodia al típico rico hacendado ridiculizándolo hasta la saciedad con una delirante actuación absolutamente esperpéntica (en el sentido literal del término).

Por lo demás, hay bastante música y baile tanto en uno como en otro film. En el caso que nos ocupa se incluye la canción "Boca de Forno" de Luiz Gonzaga, interpretada en directo ante la cámara por él mismo con su inseparable y característico acordeón blanco y el acompañamiento de los actores, que intercalan simultáneamente diálogos, un coro femenino y un grupo de percusión.

Indudablemente, por todo lo dicho Dame un respiro, Araña representa un ejercicio de autenticidad del que vale la pena disfrutar, ya que contiene lo más genuino de la esencia brasileña.