Título original: L'odyssée
Director: Jérôme Salle
Francia/Bélgica, 2016, 122 minutos
Jacques (2016) de Jérôme Salle |
La inconfundible voz en off de Rafael Taibo solía acompañar en nuestro país las imágenes de los documentales sobre el mundo submarino de Jacques-Yves Cousteau (1910–1997). Pero aparte de la imagen estereotipada del anciano comandante a bordo del Calypso, ataviado con su habitual bonete rojo, poco es lo que en realidad sabemos de una figura capital en la historia de los movimientos en pro de la preservación del medio ambiente.
Por eso el director Jérôme Salle, responsable (doce años atrás) de la muy estimable Anthony Zimmer, decidió embarcarse en este biopic a propósito de la controvertida personalidad de un hombre cuyo recuerdo comenzaba a desvanecerse entre las nuevas generaciones. Y no es que se haya centrado, precisamente, en la biografía oficial del submarinista para la elaboración del guion, sino que, más bien, su equipo y él han intentado reconstruir la parte más humana y menos conocida de la trayectoria del que fuera ídolo de masas gracias a sus trabajos divulgativos para la televisión.
Preciosista y a veces un tanto frívola, L'Odyssée tiene, sin embargo, como mérito principal la asombrosa transformación de su actor protagonista, un Lambert Wilson cuyo asombroso parecido con el homenajeado hace que nos olvidemos, por momentos, de que estamos viendo un filme de ficción.
Durante las más de dos horas de metraje, acompañadas por la siempre sugerente música del aclamado Alexandre Desplat, veremos al personaje manejarse entre los suyos, con las luces y sombras de un hombre al que la fama tal vez alejó en exceso, durante algún período de su vida, de su esposa Simone (Audrey Tautou) y de sus hijos (en especial Philippe, interpretado por Pierre Niney, el actor de moda en el cine francés).
Pierre Niney (izquierda) y Lambert Wilson caracterizados |
No hay comentarios:
Publicar un comentario