domingo, 20 de septiembre de 2020

El cochecito (1960)




Director: Marco Ferreri
España, 1960, 85 minutos

El cochecito (1960) de Marco Ferreri


Más que del vehículo que le da título, El cochecito trata de la miseria congénita en el seno de una sociedad profundamente subdesarrollada. En ese sentido, resulta mucho más revelador el diminutivo, como intensificador, que las peripecias del anciano don Anselmo (magnífico Pepe Isbert) hasta salirse finalmente con la suya. 

Porque si de una cosa nos habla esta película es de algo tan español como la mala leche. Aunque la dirigiese un italiano. El caso es que Marco Ferreri, de la mano del guionista Rafael Azcona, que adaptaba uno de los relatos de su libro Pobre, paralítico y muerto, supo captar, como ya hiciera un par de años antes en la no menos soberbia El pisito (1958), ese ambiente tan sombrío de la España franquista.



Y lo hizo valiéndose de un tono tragicómico, heredero directo del esperpento valleinclanesco o del humorismo de los Jardiel y Mihura. Una causticidad que la mojigata censura del régimen no pudo pasar por alto, hasta el extremo de eliminar la escena en la que el abuelo, harto de que lo traten como a un trasto, decide vengarse de su propia familia.

No hay, pues, buenos y malos en esta historia, sino que son todos igual de egoístas. Don Anselmo porque finge una parálisis que no tiene con tal de poder salir de excursión con su pandilla de amigos motorizados; el ortopedista que le vende el coche porque exhibe unas atenciones para con el viejo que únicamente esconden su estricto interés monetario en el asunto; el hijo de don Anselmo y el resto de familiares porque les importa más la herencia que la salud del susodicho... Y así correlativamente. Humor negro a raudales que, con la perspectiva que dan los años, tiene casi tanto de denuncia como de gracioso.



6 comentarios:

  1. Que tal Juan!
    Personalmente la incluiría entre las 10 mejores (esto de las listas ya sabes, cuestión de gustos...) películas españolas de todos los tiempos. Es una historia muy agridulce y una tremenda postal de aquella sociedad. Yo recuerdo siendo niño esos moto-triciclos que siempre eran conducidos por ancianos, por cierto, con muy mala leche...jeje
    Esa imagen final con la pareja de la Benemérita es tremenda.
    Lo dicho, una joya de nuestro cine.
    Saludos!

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    1. Hoy, en cambio, somos más modernos (o no) y disfrutamos de un mayor bienestar (o no), pero la sociedad española resulta menos "atractiva" (en términos cinematográficos) que la que aparece reflejada en esta película.

      Saludos.

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  2. Humor negre altament inquietant. Pepe Isbert cada dia m'agrada més, fins i tot en papers menys rellevants.

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    1. Sí: li passa una mica com a Carlos Gardel, que cada any canta millor.

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  3. Hola Juan, estuve un poco ausente de tu sitio. La mayoría de las últimas películas que reseñaste no las vi, así que leo tus reseñas pero no puedo aportar mucho, aunque me gusta quedarme con la sensación de cuál me gustaría ver primero y cual no la vería o la dejaría para el final.
    Esta no es la excepción, no la vi.
    Pero lo que me llama la atención es que solo la gente que sabe mucho de cine me la ha mencionado, no la nombra cualquiera.
    Y tú entre ellos.

    La voy a buscar
    Abrazo grande genio!

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    1. Es una película tan tierna como cruel, de ésas que te permiten conocer la psique profunda de un país. Espero que la disfrutes.

      Otro abrazo para ti, artista.

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