viernes, 26 de octubre de 2018

Tres días en Quiberon (2018)




Título original: 3 Tage in Quiberon
Directora: Emily Atef
Alemania/Austria/Francia, 2018, 115 minutos

Tres días en Quiberon (2018) de Emily Atef


Para recrear en pantalla la vida de cualquier celebridad, de un modo más o menos creíble, es obvio que resulta determinante el dar con un intérprete cuyo parecido físico con el homenajeado sea razonable. En el caso de Tres días en Quiberon, biopic en torno a la siempre controvertida figura de Romy Schneider que ha dirigido la berlinesa Emily Atef, la semejanza entre la actriz Marie Bäumer y el personaje que encarna es asombrosa.

La cinta, candidata al Oso de oro en la última edición del Festival de Berlín y ganadora de siete premios concedidos por la Academia del cine alemán, se centra en la estancia que la artista (1938-1982) pasó en una clínica de rehabilitación bretona justo un año antes de su prematura desaparición y en la intrusiva entrevista que allí mismo concedió a un par de reporteros del semanario Stern.



El uso del blanco y negro o la melodiosa banda sonora a cargo del tándem formado por Christoph Kaiser y Julian Maas dotan al conjunto de un aura entre crepuscular y elegíaca, acentuada por la breve aparición del francés Denis Lavant en el papel de un poeta bohemio que hará las delicias de la actriz durante una furtiva escapada nocturna.

Hastiada por las estrictas normas del adusto hotel en el que se halla recluida, el filme retrata a Romy Schneider como un ser enormemente vulnerable que, sin embargo, pretende apurar hasta el último sorbo de su desgraciada existencia. En ese orden de cosas, el que un periodista sin escrúpulos pretenda manipularla para así obtener un retrato tremendista de la antigua Sissi no deja de ser una excusa, el pretexto ideal para mostrar la fragilidad de un ser humano enfrentado a los demonios nacidos de resultas de su propia imagen pública.


No hay comentarios:

Publicar un comentario