domingo, 7 de abril de 2019

La mujer y el monstruo (1954)















Título original: Creature from the Black Lagoon
Director: Jack Arnold
EE.UU., 1954, 79 minutos

La mujer y el monstruo (1954) de Jack Arnold

Tan sencillo como respirar (o nadar): un simple paquebote en mitad del Amazonas y un actor embutido en un disfraz de anfibio. La fórmula empleada por los guionistas de La mujer y el monstruo consistió, básicamente, en sacarle el máximo partido a las escenas submarinas, así como al golpe de efecto que, a mediados de los cincuenta, suponía el uso del 3D. De ahí que, en tantas ocasiones, los personajes y objetos filmados se dirijan de frente hacia el centro de la pantalla hasta chocar con el punto de vista del espectador...

En cualquier caso, y al margen de contar con la presencia del español Antonio Moreno en uno de sus habituales papeles secundarios, Creature from the Black Lagoon es célebre por diferentes motivos. En primer lugar porque el sueco Ingmar Bergman, a priori tan alejado de las producciones de ciencia ficción de Serie B, tenía la costumbre de ver esta película todos los años el día de su aniversario. Pero también porque fue el título que encasillaría de por vida a la actriz Julia Adams (recientemente desaparecida a comienzos del pasado mes de febrero).



Aun así, el mejor y más emotivo homenaje fue el llevado a cabo por Guillermo del Toro a través de su oscarizada La forma del agua (2017), donde la criatura protagonista presentaba un aspecto calcado al del "Hombre Branquias" que aquí era perseguido con denuedo por una aguerrida expedición científica.

Aunque, en realidad, eso de que una bestia prehistórica se encapriche de una linda muchachita, a la que acaba raptando antes de ser abatido por los abnegados varones que acuden en su rescate, es más antiguo que el andar. De hecho, fue el mismo planteamiento del que se sirvieron los creadores de King Kong (1933), otro filme que daría lugar a no pocas secuelas y sucesivos remakes. La mujer y el monstruo, por cierto, tuvo dos: La venganza del hombre monstruo (1955), dirigida por el propio Jack Arnold, y El monstruo camina entre nosotros (1956) del malogrado John Sherwood (1903–1959).


6 comentarios:

  1. Fa poc, en una associació del meu barri on fan activitats sobre cinema, la vaig poder veure, amb motiu d'un homenatge a l'actriu a causa de la seva mort. La van passar acompanyada d'un reportatge molt interessant, que ja tenia uns quants anys, on molts dels seus protagonistes i gent de l'equip de rodatge, monstre inclòs, comentaven aspectes de l'època i del rodatge, amb força ironia, estava molt bé.

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    1. Sí, en sóc conscient, ja que visito el teu blog "La panxa del bou" a diari. Per això em van venir ganes de veure la peli en saber que la projectaven a la Filmo.

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  2. ara, la van passar de forma convencional, hauria estat bé veure-la en tres dimensions.

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    1. Home, sí: resulta més espectacular (tot i que mira que n'arriben a ser d'incòmodes les ulleres!)

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  3. Que tal Juan!
    La de tiempo que no escuchaba/leia lo de "paquebote", esta bien recuperar estas palabras que desgraciadamente caen en el olvido. Buen apunte lo del 3D, lo cierto es que si la ves y no lo sabes te parecen extraños ese tipo de planos. No sabia lo de Ingmar Bergman, curioso ese detalle.
    Ya que mencionas el parecido con la criatura de la peli de Del Toro, ¿estas de acuerdo con todas estas similitudes que aparecen en peliculas actuales son realmente homenajes o es una forma para salir del paso y no reconocer la falta de ideas o simplemente la copia? Yo por mi parte no lo tengo muy claro...
    De Julie Adams se decia que tenia las mejores piernas del cine, aunque esto tambien se decia de Cyd Charisse. Por cierto, creo que fue a raiz de esta pelicula que le cogi cierto digamos miedo a bañarme en los lagos...jeje
    Saludos!

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    1. Hola, Fran:
      Respecto al vocabulario, no es que me dedique, como tú dices, a "recuperar" palabras, sino que me gusta utilizar el término preciso en cada caso. Y en cuanto a lo de la falta de ideas en el cine actual, yo creo que, en realidad, la industria lleva toda la vida reutilizando y reciclando los mismos ingredientes: no es falta de inspiración, sino apostar por lo que saben que funcionará en taquilla. ¡Ah, el vil metal!

      Gracias por tus comentarios y hasta pronto.

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