domingo, 24 de abril de 2016

Mercado de ladrones (1949)




Título original: Thieves' Highway
Director: Jules Dassin
EE.UU., 1949, 94 minutos

Mercado de ladrones (1949) de Jules Dassin

Tras abandonar los estudios Universal, Jules Dassin rodó este guion de A.I. Bezzerides para la 20th Century Fox. A decir verdad, hay que reconocer que ni el argumento ni los personajes de Mercado de ladrones son excesivamente creíbles: ni el inocentón Nick Garcos (Richard Conte) ni el malísimo Mike Figlia (Lee J. Cobb) ni la italiana Rica (Valentina Cortese) resultan del todo convincentes. Otra cosa es que los actores que encarnan a los personajes sean de una solvencia más que contrastada: el problema viene de más atrás, ya desde la escritura del texto (basado en una novela del propio Bezzerides). ¿Por qué acepta Nick el negocio de las manzanas que le propone Ed Kinney (Millard Mitchell) si es evidente que será un desastre? ¿Sólo para vengar a su padre? ¿Por qué dice Nick en voz alta que ha ganado cuatro mil dólares mientras habla por teléfono con su novia si todos los del bar le están escuchando? ¿No le da miedo que puedan quitárselo? Y hablando de Polly (Barbara Lawrence), ¿por qué deja plantado a Nick a primeras de cambio si fue capaz de esperarlo durante toda la guerra?

Y así podríamos ir cuestionando otros tantos sinsentidos de una película que dista mucho de alcanzar el dramatismo de El salario del miedo de Henri-Georges Clouzot (1953), filme de planteamiento muy similar, también protagonizado por camioneros que llevan al límite su tarea, pero muy superior en intensidad.

De todos modos, la película refleja fielmente la lucha por la supervivencia de los inmigrantes en Estados Unidos. Griegos, polacos, italianos: en uno u otro momento todos se prestan al regateo, ávidos de si los mayoristas les comprarán las manzanas a 6'50 o a 3 dólares la caja. En plena posguerra las circunstancias apremiaban y la desesperación hacía que algunos se lanzaran a la carretera, dispuestos a cruzar el país en camiones destartalados, con tal de llevar su cargamento de fruta a los mercados de San Francisco.

Richard Conte (derecha) y Lee J. Cobb

No hay comentarios:

Publicar un comentario