jueves, 28 de mayo de 2015

Hasta que llegó su hora (1968)




Título original: C'era una volta il West/Once Upon a Time in the West
Director: Sergio Leone
Italia/EE.UU./España, 1968, 165 minutos

Hasta que llegó su hora (1968) de Sergio Leone


Cuando América parecía haberse cansado del western, Europa lo acogió con sumo placer. Pero dándole otro enfoque... Cualquiera que empiece a ver Hasta que llegó su hora (1968) se dará cuenta enseguida de que estamos ante una obra maestra, sin duda palabras mayores de un género al que Sergio Leone supo hacer evolucionar más allá de sus planteamientos tradicionales. De ahí que, aunque se reconozcan fácilmente sus lugares comunes (por ejemplo, tres pistoleros esperando la llegada de un tren al inicio de la película, como ocurría en Solo ante el peligro [1952]), la música de Ennio Morricone (quien no dudó en servirse de teclados o de la guitarra eléctrica), las largas secuencias, los primerísimos planos del rostro de los actores... todo ello contribuye a pergeñar la versión barroca del Far West (Spaghetti Western lo llamarían sus detractores).

Que, además, el malo de la peli sea interpretado por Henry Fonda es un plus, ya que hasta ese momento el actor americano se había distinguido por encarnar a personajes angelicales: vendría a ser una forma de impactar al espectador similar a la que había supuesto previamente ver a Gregory Peck hacer de Capitán Ahab en Moby Dick (1956). Y si, encima, le acompañan en pantalla Charles Bronson y la sex symbol del momento Claudia Cardinale, el cóctel resultante tenía que ser a la fuerza memorable.

Como inolvidables son muchos de los diálogos. Por ejemplo aquel en el que Cheyenne (Jason Robards) se lamenta cínicamente de que Armónica (Charles Bronson) le esté entregando a las autoridades a punta de pistola:

Harmonica: The reward for this man is 5000 dollars, is that right?
Cheyenne: Judas was content for 4970 dollars less.
Harmonica: There were no dollars in them days.
Cheyenne: But sons of bitches... yeah.

Armónica: La recompensa por este hombre ascendía a 5000 dólares, ¿no es cierto?
Cheyenne: Judas se habría conformado con 4970 dólares menos.
Armónica: Todavía no existían los dólares en aquellos tiempos.
Cheyenne: Pero sí que había hijos de perra...

Es probable que en el desierto de Tabernas (Almería) aún resuenen los ecos del rodaje de esta épica producción.

La música es un personaje más de la película

La armónica actúa de leitmotiv

¡Donde las dan las toman!

Sergio Leone (de pie en el centro) y los cuatro protagonistas en un descanso del rodaje

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