sábado, 27 de abril de 2024

Nazareno Cruz y el lobo (1975)




Título completo: Nazareno Cruz y el lobo: las palomas y los gritos
Director: Leonardo Favio
Argentina, 1975, 92 minutos

Nazareno Cruz y el lobo (1975) de Leonardo Favio


Más que verla hay que soñarla: Nazareno Cruz y el lobo (1975), subtitulada con un elocuente "las palomas y los gritos", bebe de distintas tradiciones, todas ellas en torno al mito de la licantropía reelaborado desde una óptica mefistofélica. Así pues, la leyenda del joven campesino, víctima de una antigua maldición de origen guaraní por ser el séptimo y último hijo varón de su padre, se enriquece aquí con referencias visuales que lo mismo remiten al Orson Welles de Macbeth (1948) que al Bergman de Vargtimmen (1968).

Durante muchos años y hasta fechas muy recientes, la cinta que nos ocupa ostentó el récord de haber sido la más taquillera en la historia del cine argentino, circunstancia avalada por las numerosas revisitaciones (incluso musicales) de que ha sido objeto a lo largo del tiempo la fuente original, el célebre serial radiofónico de Juan Carlos Chiappe, originalmente estrenado en 1951.



El caso es que, en manos de Favio, la historia de Nazareno (Juan José Camero) y su enamorada Griselda (Marina Magalí) adquiere una dimensión que va más allá de lo estrictamente terrorífico (los títulos de crédito iniciales, con rayos y truenos sobre fondo nuboso mientras suenan las palabras de algún conjuro maléfico, irían en esa línea) para adentrarse en un ambiguo barroquismo erótico de estética kitsch.

Por lo demás, la reiterativa melodía del tema "Soleado" de Zacar (alter ego del italiano Ciro Dammicco) ilustra la pugna del amor frente a unas fuerzas del mal que lideran un atípico Diablo (Alfredo Alcón) y la brujeril Lechiguana (Nora Cullen). A fin de cuentas, parece insinuar la moraleja del filme, qué más da que los amantes sean abatidos a balazos por los lugareños de la comarca si su pasión desbordante sobrevivirá más allá de la muerte.



4 comentarios:

  1. Algo habrá visto el público en ella para ostentar ese record, supongo.

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    1. Yo creo que en aquel contexto debió de ser recibida como una película muy atrevida.

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  2. Hola Juan!
    Para nuestro cine fue toda una novedad, ni por asomo las películas solían tener ese nivel de magia onírica y que trataran a la vez sobre leyendas campestres de nuestros pagos.
    Es una película extraña para quienes consumen el cine típico, eso sí, pero muy llamativa en varios aspectos.

    Un abrazo!

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    1. Desde luego no deja indiferente, eso seguro. La genialidad de Favio se percibe, además, en cada fotograma.

      Un abrazo, amigo Frodo.

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