Directora: Elena Martín Gimeno
España, 2023, 112 minutos
Creatura (2023) de Elena Martín |
Si algún reproche se le puede recriminar a Elena Martín Gimeno, protagonista y directora de Creatura (2023), es el hecho de que su película apunta tal vez en demasiadas direcciones, aunque finalmente no concreta ninguna. Queda claro, desde buen principio, que todo gira en torno a la vida afectiva de una treintañera, Mila, quien, tras una crisis de pareja, llevará a cabo una introspección regresiva cuyos dos momentos álgidos nos sitúan, respectivamente, en la adolescencia y primera infancia del personaje. Etapas cruciales, dicho sea de paso, para la formación del carácter, pero también en lo que concierne a experiencias iniciáticas que posteriormente le pasarán factura, dando como resultado una sexualidad a todas luces insatisfactoria.
De la relación con sus padres (Alex Brendemühl y Clara Segura) se desprende que la Mila de quince años se sintió a menudo incomprendida, víctima de unos condicionantes sociales que por ejemplo impedían que una chica pudiese quedarse a dormir en casa de un amigo o que en el pueblo pasaran a señalarla con el dedo por mostrar sus encantos a través del Messenger o besarse con algún chaval a la luz de la luna en las calas recónditas de una playa solitaria.
Lo sorprendente es que la niña que fue alguna vez daba ya muestras de una precocidad indiscutible al proclamar a las cuatro vientos "¡Me bota la vulva!" y restregarse contra enseres y aun allegados (incómodos ante la evidencia de que una cría de tan corta edad se masturbe). Origen, todo ello, de futuros traumas y bloqueos emocionales, ya sean en forma de disputas familiares o de urticaria recurrente.
Después de haber sido una de Les amigues de l'Àgata (2015) y de deslumbrar con su primer largo, Júlia ist (2017), la joven realizadora catalana vuelve a la carga con una cinta, premiada en Cannes, a medio camino entre el retrato generacional y la reivindicación feminista. Queda por ver, eso sí, si el filme, además de a millennials y colegialas de la Generación Z, es capaz de entusiasmar también a otros sectores del público. De momento parece ser, según tuiteó hace unos días la distribuidora Avalon, que a la reina Letizia le ha encantado.
Eso será bueno o no?
ResponderEliminarBromas aparte, al fin y al cabo es mujer y se supone que inteligente, así que me parece un buen síntoma.
En cualquier caso, a mí me parece una película un poco sobrevalorada. Aparte de que ese final, con la protagonista bañándose/purificándose desnuda en la playa, no deja de ser un topicazo.
EliminarUna muy interesante y audaz película de un rasgante verismo a través de una puesta en escena muy física o alegórica, depende del momento, cuyo supuesto mensaje feminista, de haberlo, queda disuelto en las peculiares características del personaje protagonista. En el comienzo de la película, un plano de una niña a la que vemos en escorzo sentada en el borde de una cama mientras adivinamos que se frota la vagina (ella, por su corta edad, no sabe que se está masturbando) nos “informa” de que la pequeña siente algo distinto y especial en esa zona de su cuerpo. A partir de ahí, narrativamente van alternándose las distintas etapas de esa mujer que ya en la madurez continúa sin resolver un problema de índole sexual, tal vez porque su acentuado ombliguismo la impide salir de ese ensimismamiento para empatizar con quienes de alguna manera sufren las consecuencias de una desazón (con un componente de sentimiento de culpa) tanto psicológica como física somatizada en ese contumaz sarpullido cutáneo. Por eso, ante la incapacidad canalizar sus pulsiones, de encontrar una puerta de salida a lo que deriva en trauma, busca un determinado alivio, por así decirlo, en la inmersión en el agua.
ResponderEliminarDesde luego, haces un análisis muy certero.
EliminarGracias.
Aborda de forma audaz la compleja sexualidad femenina, así como el desconcierto de la nueva masculinidad. Resulta certera en sus apuntes y muy creible, aunque también es cierto lo que señalas, que no queda muy claro a dónde quiere llegar; quizás por eso cierre el círculo con la protagonista nadando como cuando era niña.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es probable. No sé: a mí me ha costado conectar con ella. Debe ser que me estoy haciendo mayor.
EliminarUn abrazo.
No hay que desdeñar un premio en Cannes, pero por lo que cuentas no parece una película como para tirar cohetes.
ResponderEliminarSaludos.
Si la película es buena o no, sólo el tiempo lo dirá. A mí, de momento, no me acaba de convencer.
EliminarSaludos.