Director: Tilman Singer
Alemania/EE.UU., 2024, 102 minutos
Cuckoo (2024) de Tilman Singer |
Otra de las perlas que ha pasado por la última edición del Festival de Sitges ha sido esta coproducción germano-estadounidense en cuyo reparto, por esos azares de la vida cinéfila, se ha colado la catalana Greta Fernández en un papel secundario. Y aunque no puede decirse que estemos ante una obra redonda, lo cierto es que Cuckoo (2024) propone una atmósfera sobrecogedora muy cercana a la de clásicos del género como El resplandor (1980) o Twin Peaks (1992). La acción, de hecho, transcurre en un recóndito complejo hotelero perdido en mitad de los Alpes en el que van a tener lugar una serie de extraños fenómenos paranormales.
Según parece, una misteriosa criatura con apariencia humana, aunque más cercana a las aves que a las personas, se adueñó del vientre de una mujer la hija de la cual, llamada significativamente Alma (Mila Lieu), es ahora una niña que no habla pero se fija mucho... Al mismo tiempo, su hermanastra mayor, Gretchen (Hunter Schafer), se debate en un insólito delirio en el que sus propias inseguridades de adolescente se mezclan con los secretos inconfesables de una familia menos convencional de lo que a simple vista cabría pensar.
Y es que, del mismo modo que la hembra del cuclillo pone sus huevos en los nidos de otras aves, el ser malévolo que atormenta a los protagonistas hizo lo propio en su día con el objetivo de perpetuar una especie maligna capaz de provocar convulsiones y hasta seísmos en varios kilómetros a la redonda.
Por otra parte, la condición de actor trans de Hunter Schafer ha llevado a muchos críticos a considerar que la película sea tal vez una alegoría a propósito de la transición de género. Sea como fuere, y pese a los defectos de una puesta en escena que se acaba perdiendo por derroteros un tanto trillados, el estado mental por el que discurre la trama, entre hipnótico e impetuoso, justifica sobradamente el visionado de una cinta de las que no dejan indiferente a casi nadie.
¡Cuánta sangre!
ResponderEliminarBueno, no creas: en realidad no tanta. Se trata más bien de un filme de terror psicológico.
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