Título original: His Girl Friday
Director: Howard Hawks
EE.UU., 1940, 92 minutos
Luna nueva (1940) de Howard Hawks |
¿Cómo se puede hablar tan deprisa? La vis cómica de His Girl Friday (1940), adaptación un tanto libre de The Front Page, la pieza teatral que Ben Hecht y Charles MacArthur habían estrenado en 1929, hay que buscarla en esos diálogos vertiginosos que la pareja protagonista se lanza mutuamente a un promedio de 240 palabras por minuto. Técnica que no era tan habitual por aquel entonces y que, en manos de un maestro como Howard Hawks (con la ayuda inestimable del guionista Charles Lederer e incluso de los actores, que improvisaron más de una réplica), sería clave para cosechar un rotundo éxito de taquilla que el tiempo, además, ha elevado a la categoría de clásico indiscutible.
Al margen del ritmo trepidante de una impecable puesta en escena o de la crítica implícita que conlleva su visión ácida de la profesión periodística (a pesar de que los créditos iniciales advierten irónicamente que la cinta no contiene "ningún parecido con los hombres y mujeres de la prensa de hoy en día"), lo curioso es que sea el marcado carácter autorreferencial de varias de sus citas (por ejemplo, cuando, ya hacia el desenlace, Cary Grant menciona de pasada a cierto Archie Leach, nombre auténtico del actor antes de convertirse en una estrella) lo que hace de esta película un producto sumamente singular.
A diferencia de lo que ocurría en el texto original, así como en la versión llevada a cabo una década antes por Lewis Milestone, el personaje de Hildy Johnson pasaba a ser ahora una bella reportera interpretada por Rosalind Russell. Exmujer, para más inri, del liante Walter Burns (Cary Grant), editor del Morning Post y en absoluto dispuesto a perderla ni a ella ni a las brillantes crónicas que escribe para el mencionado periódico. Y es que Hildy, tras cuatro meses de ausencia, se acaba de plantar en la redacción anunciándole su inminente matrimonio con un tal Bruce Baldwin (Ralph Bellamy).
Ni que decir tiene que la trama del reo de muerte Earl Williams (John Qualen) acabará quedando en segundo plano conforme las numerosas artimañas del ladino Burns aparten al gris agente de seguros Baldwin de su prometida. En ese sentido, y sin dejar de ser otro ejemplo sobresaliente de screwball comedy, His Girl Friday (algo así como "Su esclava", donde el apelativo Viernes alude al personaje de Robinson Crusoe) se aleja de su primitivo espíritu de denuncia social (contra la corrupción política o el sensacionalismo de los mass media) en beneficio de los resortes infalibles de lo que pudiera considerarse una atípica comedia de enredo romántica.
Estupenda comedia, divertida, chispeante, con mensajes claros y, por desgracia, muy actuales
ResponderEliminarYa lo creo: como que eso de contar las cosas en función de los intereses de un grupo mediático sigue a la orden del día.
EliminarHola Juan!
ResponderEliminarUna autentica delicia. No había reparado en ese detalle del titulo original, muy curioso.
Saludos!
Supongo que hoy en día eso de "chica esclava" sonará un tanto sexista, a pesar de que la película ofrece en realidad una imagen bastante moderna de la mujer.
EliminarSaludos.